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MENSAJES 2023 2° trimestre

21 de mayo, mensaje de Nuestra Señora,
(María Santísima): "Querido hijo Marco, hoy, mientras celebras aquí mi Aparición a Caravaggio a mi hija Giannetta, vengo nuevamente del Cielo para decirte:
Yo soy tu Mamá, he venido a consolarte, como bajé del Cielo a consolar a mi hija Giannetta. Sí, viendo cuánto ya habíais sufrido a tan corta edad, bajé del Cielo para consolarte, para ser tu Mama consoladora, tu Mama generosa y amorosa que todo te da y siempre te dará todo.
Bajé a decirte que escuché tus oraciones, escuché tus gemidos, tus sollozos y bajé del Cielo para darte la verdadera paz, la verdadera felicidad que solo en Dios, solo en mi llama de amor, puede encontrar el hombre. .
Bajé del Cielo para consolarte y transformarte en mi mensajero de paz como transformé a Giannetta, para llevar mi mensaje de paz, esperanza y amor al mundo entero.
…Sin amor no puedeis haber paz, hasta que los seres humanos vivan lo que mi Hijo enseñó hace dos mil años: 'Amaos los unos a los otros'. No habrá paz.
Por eso, hijos míos, sed fuentes de amor, de bondad, de caridad para este mundo que ha perdido completamente el amor y ha elegido morir a todo lo bueno, a todo lo hermoso.
Y tú, mi hijito Marco, el más ardiente y celoso defensor de mis Apariciones en todo el mundo... En este momento 32 mil almas están siendo liberadas del fuego del Purgatorio por tus méritos ofrecidos. Y 63 mil almas en este mundo son tocadas por la gracia del Señor, se apasionarán por mi Hijo Jesús y por mí y se volverán fieles y celosos en el servicio del Señor.
Ahora los bendigo a todos con amor: de Caravaggio, de Pontmain y de Jacareí”.

20 de mayo, mensaje de Nuestra Señora,
(María Santísima): "¡Hijos míos, hoy los invito nuevamente a acercarse con amor a mi Corazón Inmaculado!
Sólo el amor puede salvar al mundo.
…Sólo cuando todos los seres humanos vivan lo que dijo mi Hijo Jesús: 'Amaos los unos a los otros', sólo entonces habrá paz.
Solo en el amor se puede encontrar la verdadera paz y la verdadera felicidad en la vida, solo en el amor que es Dios.
…Mi Corazón Inmaculado es amor y los llama a todos a entrar en él, que es templo y morada del Amor. Para que luego, finalmente, vuestros corazones adquieran mi misma semejanza, la semejanza de mi Inmaculado Corazón, adquieran mis sentimientos. Y así podréis amar a todos con mi amor.
…Mi Inmaculado Corazón desea más sacrificios para la salvación de las almas, por eso, hijos míos: oren más, renuncien a todo lo que más desean y aman y ofrézcanmelo por la salvación del mundo.
Hay muchas almas que necesitan oración y sacrificio todos los días. Si vierais como yo cuantas almas se pierden cada hora, no desperdiciaríais un solo minuto de vuestro día, ni siquiera una hora sin rezar u ofrecer algún sacrificio a mi Inmaculado Corazón.
…Ahora los bendigo a todos con amor: desde Lourdes, desde Pontmain y desde Jacareí.
Paz Marco, mi amado hijo, debes continuar con la misión que te he encomendado. Tienes que crecer, hijo mío, cada vez más en mi llama de amor, hasta convertirte en llama de amor en plenitud, llama de amor incesante, y esto está por suceder.
…Desde el principio fuisteis enviados por Mí a todos los pueblos ya todas las naciones a proclamar la verdad, como un nuevo Juan Bautista que prepara el camino a mi Hijo Jesús, el camino para el retorno de nuestros Corazones, y así debéis permanecer.
…Con tuas oraciones, con tu trabajo habes acercado a mi Corazón 78 mil almas que han sido tocadas por mi llama de amor.
Yo vivo cerca de los que me aman, me sirven y me bendicen.

14 de mayo, mensajes de Jesús y Nuestra Señora,
(Sagrado Corazón de Jesús): “Almas mías escogidas, vengo hoy con mi Santísima Madre, en este día de tanta fiesta y alegría en que celebráis el Aniversario de la primera Aparición de mi Madre en Fátima, el 13 de mayo de 1917.
Sí, mi Sagrado Corazón ha enviado a mi Santísima Madre a Fátima, para llamar a toda la humanidad a volver a mi Sagrado Corazón por el camino de la Conversión, la Oración, la Penitencia y una profunda devoción a mi Corazón que significa: vivir en estado de gracia, vivir en mi amor, permanezcer en mi amor, permanezcer en mí y no me ofendan con desobediencias, pecados, ingratitudes y traiciones.
Sí, mi Sagrado Corazón trabajó poderosamente en Fátima a través de mi Santísima Madre, llamando a todos a la conversión y reconduciendo al camino de la gracia y de la salvación a una multitud innumerable de tantos pecadores.
…El mundo entero puede comprender nuestra preocupación por todos y cada uno, cuán grande es nuestra aflicción por lo que os espera en el futuro, hijos míos.
…Todos los que miren a mi Madre que se apareció en Fátima y también aquí, podrán sentir mi amor, podrán ver cuánto amo a los pecadores, cuánto espero el regreso de cada uno de ellos a mi Corazón. Y cuánto no quiero la muerte, el exterminio de los pecadores, sino que quiero que se conviertan y vivan.
…Si la humanidad continúa desobedeciendo a mi Madre, una nueva y peor guerra vendrá a castigar al mundo, las plagas vendrán una tras otra.
Además, el hambre, la persecución y todo tipo de plagas vendrán por todo el mundo. Sí, los pecados cometidos contra mi Santísima Madre, especialmente la desobediencia a sus palabras, serán severamente castigados en esta vida y en la venidera.
Pecan contra el Espíritu Santo, por lo que deben ser castigados por la Justicia de mi Padre.
Todos aquellos que dicen que no es obligatorio creer en los Mensajes de mi Madre, están pecando contra el Espíritu Santo.
Pecan contra el Espíritu Santo todos aquellos que alejan a tantas almas de mi Madre negando Sus Apariciones y Mensajes.
…Si los Mensajes de mi Madre fueran obedecidos por las Naciones, serían bendecidas con abundancia de bienes, con paz, con armonía, con prosperidad.
Si las familias obedecieran los Mensajes de mi Madre, serían bendecidas con unidad, paz, amor, caridad, prosperidad, salud y toda clase de bienes, sobre todo, con hijos santos.
…Si el pueblo católico obedeciera los Mensajes de mi Madre, sería bendecido también con buenos pastores, con abundancia de vocaciones, con muchos santos, con santas familias y tendría paz.
Como no obedecen, son castigados con malos pastores, con falta de vocaciones, con el cierre de muchas Iglesias y obras santas, que antes les iba muy bien. Y por eso reina la violencia, reina el mal, Satanás reina en muchos lugares.
¡Convertirse! Obedezcan los Mensajes de mi Madre y todos estos males cesarán y serán bendecidos por mi Sagrado Corazón.
Es el tiempo de volver, convertiros y volver a Mí.
¡Es la última llamada, estás en los últimos avisos!
…Debéis volver a Mí, a Mi Sagrado Corazón, o moriréis por la vida eterna.
…Si el mundo acepta este remedio, será sanado y salvado. Si rehúsa esta medicina estará perdido para siempre, condenado a la muerte eterna y estará perdido.
Cada uno de ustedes debe hacer su elección.
…Vida o muerte, Cielo o Infierno, elige lo que quieras, pero te verás obligado a soportar lo que has elegido errado, lo que has elegido mal.
La humanidad, especialmente Europa, ha pagado muy caro el haber optado por no escuchar, por no obedecer a los Pastorcitos de Fátima, los Mensajes de mi Madre que ellos proclamaban.
No seáis como ellos, hijos míos, de lo contrario pagaréis muy cara vuestra desobediencia y vuestra insensatez pecaminosa.
Os bendigo con amor: desde Fátima, desde Dozulé y desde Jacareí.
(María Santísima): “Yo soy la Señora del Rosario para llamar a todos mis hijos a rezar el Rosario que es todopoderoso para cambiar todos los acontecimientos del mundo.
Con el Rosario podrás resolver todos los problemas individuales y mundiales e incluso revertir el mal en Victoria para el Señor, para el bien y para ti mismo.
Con el Rosario, mis pastorcitos, sobre todo mi pequeño Francesco Marto ha crecido enormemente en santidad. En poco tiempo adquirió todos los méritos que necesitaba para ser digno del Cielo. Y por eso, en tan poco tiempo, menos de dos años, lo llevé a la gloria celestial.
…Cuántos pueblos están todavía hoy esclavizados por el reino diabólico de Satanás, porque el Mensaje de Fátima no fue obedecido como lo quiso mi Hijo Jesús, por lo tanto, el castigo de la peste, del hambre, de la destrucción de familias, de pueblos, de naciones y de guerras caerán sobre toda la humanidad. Por eso: esta generación se encuentra completamente corrompida y perdida como castigo a los padres, a los abuelos que no han obedecido el Mensaje de Fátima.
Sólo cuando mi Mensaje de Fátima sea obedecido, el mundo tendrá paz, los jóvenes serán buenos y santos, las familias tendrán armonía, amor y caridad. Y las naciones vivirán como una gran familia donde todos se respetarán, se ayudarán y se amarán como hermanos e hijos de mi Inmaculado Corazón.
…¡Solo cuando mis Mensajes de Fátima sean finalmente obedecidos, el mundo tendrá paz!
Rezando muchos Rosarios podéis lograr esto, por esto: ¡Orad, orad, orad sin cesar!
…Mostrad a mis hijos toda la gloria, toda la verdad y toda la belleza de mis Apariciones, sobre todo: las de La Salette, Fátima, Pontmain, Lourdes, Castelpetroso, Quito y también Bonate.
…Adelante, Marco, mi guerrero de Fátima, guerrero de mi paz, antes que llegue el día de la justicia te envío con mi paz, con mi gracia y mi llama de amor para toda la humanidad. Si la humanidad rehúsa este remedio, entonces tendrá que soportar la hiel de la Justicia de Dios.
Los bendigo a todos con amor: desde Fátima, desde Pellevoisin y desde Jacareí".
Y tú, mi hijito Marco, mi Caballero de Fátima, mi 4º pastorcillo, a través de ti seré conocida, amada, obedecida y glorificada en todo el mundo a través de los nuevos medios de comunicación que has creado para mí (apparitionsTV). Donde por fin mis hijos conocerán todas mis Apariciones, todos mis Mensajes, comprenderán y sentirán mi Dolor y darán su sí a mi Corazón Inmaculado, y serán santos.
Y por eso estarás a mi diestra en el día de mi Triunfo, derrotando conmigo a Satanás y trayendo finalmente conmigo a toda la humanidad a la Santísima Trinidad, humanidad sanada, restaurada y renovada para la mayor gloria del Señor.
A todos les dejo mi paz

13 de mayo, mensaje de Nuestra Señora,
(María Santísima): "Mi querido hijo Marco, hoy, mientras celebras aquí con estos hijos míos con tanta emoción y amor el Aniversario de mi primera Aparición en Fátima a mis Tres Pastorcitos, vengo nuevamente del Cielo para decir : ¡Vine de los Cielos!, para traer a la Tierra, en Fátima, mi Mensaje de Oración y Conversión para toda la humanidad.
Vine del Cielo para anunciar que la Guerra pronto terminaría si todos rezaran el Rosario todos los días. Y que todas las guerras sean removidas y borradas con la oración poderosa de mi Rosario para que todo pueda cambiar.
Vine del Cielo para levantar los ojos y el corazón de todos los hombres de la Tierra, para mirar hacia el Cielo hacia el Paraíso de donde vine y donde profeticé que enviaría a mis amados hijos Pastorcitos. Para que todos mis hijos recuerden que el fin de su creación, de su existencia no es la Tierra, sino el Cielo.
…Vine del Cielo para deciros que en este mundo, hijos míos, nunca encontraréis la verdadera paz y felicidad, sino sólo en Dios, sólo en las cosas del Cielo. Por tanto, desatad y despegad vuestros corazones de las cosas terrenales y fijad vuestros pensamientos y corazones en Dios, y entonces encontraréis y sentiréis la verdadera alegría de la que brota la verdadera paz.
Vine del Cielo para anunciar que si la humanidad seguía ofendiendo a Dios y no escuchaba mis Mensajes que di en La Salette, París, Lourdes y Pontmain, vendría una nueva y peor Guerra y muchas Guerras más, hasta acabar exterminando por completo. humanidad. Y que sólo la Conversión, el Sacrificio y la Oración pueden garantizaros un futuro de paz, felicidad y alegría.
Vine del Cielo para decirles a todos mis hijos que al final mi Inmaculado Corazón triunfará sobre Satanás y sus fuerzas del mal. Y luego, traeré al mundo una nueva era de  gracia, la paz, la santidad y el amor de Dios.
…Adelante, Marco, mi Caballero de Fátima, todavía hay muchas almas que necesitan conocer mi Mensaje de Fátima para salvarse. Hay que buscarlos, hay que llevarlos a la luz.
No te escondas, no te calles, no tengas miedo de nada. Adelante, como siempre mi impertérrito guerrero. Y adelante también, hijos míos todos, ayudando a mi elegido, a dar a conocer mi Mensaje de Fátima a todos mis hijos.
…Ahora bendigo generosamente a todos mis hijos: de Lourdes, de Fátima y de Jacareí”.

7 de mayo, mensaje de Nuestra Señora,
(María Santísima): “Queridos hijos: ¡ORACIÓN, SACRIFICIO, PENITENCIA, CONVERSIÓN!
Sin estas cosas es imposible la salvación del mundo, por tanto, a partir de vosotros, reformad completamente vuestra vida y renovad el mundo entero con la conversión.
Hoy también estáis celebrando el aniversario de la develación de la medalla de mi castísimo esposo san José.
Quien lleve la Medalla de mi esposo San José y muera con ella no será condenado, sino que irá al Cielo, a la salvación eterna y será librado por Mí de conocer las llamas del infierno.
Quien lleve la Medalla de mi esposo San José será protegido por mí y por él en cada momento de la vida y seremos su consuelo, su paz y su luz.
…¡Convertirse!¡Convertirse! El mundo aspiró el humo de Satanás y cubrió todo y con este humo perecieron vuestras almas en el pecado.
¡Ahora debéis convertiros, debéis volver a Dios! Es necesario que volváis a mi Hijo Jesús por amor, entregándole vuestro corazón.
…Todo lo que mi Hijo Jesús le había dicho a mi hija Faustina Kowalska, Santa Faustina, ahora se cumplirá.
Verdaderamente veréis el mal, la apostasía parece dominarlo todo y ser el vencedor seguro, pero al final mi Hijo Jesús triunfará, mi Inmaculado Corazón hará caer por tierra a todos nuestros enemigos. Y finalmente el trono de nuestros dos Gloriosos Corazones se levantará sobre el mundo entero y finalmente llegará la paz.
Mis Apariciones aquí serán reconocidas como verdaderas por toda la humanidad, y entonces todos los pueblos se golpearán el pecho con gran temor, con gran contrición, pidiendo perdón por todos sus pecados. Me reconocerán como mediador, abogado y corredentor y, finalmente, daré la paz al mundo entero.
¡Confianza! ¡Esperanza! ¡Perserverancia!
Perseverad en la oración, sólo la oración perseverante puede obtener grandes gracias de mi Hijo Jesús.
Estoy al lado de cada uno de vosotros y nunca os dejo, estoy siempre presente en vuestros sufrimientos. Acordaos que yo también sufrí, pero perseveré en el amor de Dios.
Perseverad en el amor de Dios y un día vosotros también seréis recompensados y coronados de gloria conmigo en el Cielo.
¡Rezad mi Rosario todos los días! Con el Rosario daré grandes gracias en vuestra vida y en la vida de muchas almas.
…¡Adelante Marcos! ¡Date prisa, el tiempo apremia! El tiempo de la misericordia está llegando a su fin, apresúrense todo. Caminen, hablen, adviertan a todos mis hijos, trabajen incansablemente para ayudarme a salvar almas.
…He llorado, he aparecido, he dado señales, enviado mensajes y advertido al mundo entero, he hecho de todo, pero el mundo siempre ha permanecido sordo a mi voz.
¡Id ahora hijos de la luz, mis apóstoles de la luz, proclamad la verdad, traed mi luz, haced triunfar mi luz!
Los bendigo a todos con amor: desde Pontmain, desde Lourdes y desde Jacareí".

30 de abril, mensaje de Nuestra Señora,
(María Santísima): “Hijos míos, hoy vengo nuevamente del Cielo para invitarlos a todos a la oración y a la conversión.
En este tiempo, cuando las tinieblas de la apostasía terminan de descender sobre el mundo y cubrirlo por completo con sus espesas tinieblas, todavía vengo a decir: ¡sed la luz! Debéis iluminar la Tierra con la oración, con el ejemplo de vida de cada uno, con la santidad, con el esfuerzo siempre continuo de anunciar a mi Hijo Jesús, de defender la fe, la verdad y ser verdaderamente llamas de amor para que mi Corazón se encienda. la tierra.
Para ser estas llamas de amor, debéis vivir una vida de oración continua, de total consagración a mi Inmaculado Corazón, de completa obediencia y docilidad a mi voz, a mis mensajes y en todo seguirme por el camino de la total obediencia y fidelidad a la voluntad del Padre.
…Haced los cenáculos por todas partes como os he pedido. Para que mi luz mística pueda iluminar toda la Tierra.
Ven aquí rezando y cantando en procesión.
… Difundid mis mensajes cada vez más. ¡Nunca es suficiente, nunca es suficiente! Así debeis ser, así debeis pensar.
…Difundid aún más la vida de mi hija Filomena, para que mis hijos, especialmente los jovenes, imiten su valentía, su amor ardiente por mi Hijo Jesús y por mí, las virtudes y el amor de Santa Filomena.
…Ahora los bendigo a todos con amor: desde Lourdes, desde Pontmain y desde Jacareí.

23 de abril, mensaje de Nuestra Señora, por la noche.
(María Santísima): “¡Queridos hijos, Yo soy la Señora de la Sabiduría de Genazzano! Hice traer el fresco de mi imagen a la ciudad de Genazzano en Italia, para estar entre mis hijos, para estar cerca de ellos, para ser para ellos: luz, amor y consuelo.
…La sabiduría humana, la ciencia nunca ha santificado alma alguna, por eso doy a mis hijos la sabiduría divina, que sólo los puros de corazón pueden recibir y comprender.
…Soy el asiento de la Sabiduría, soy la Madre del Buen Consejo, ya quien a mí viene a adquirir la sabiduría divina, le daré la sabiduría de la que yo misma he sido colmada siempre por la Santísima Trinidad.
…Dejé la tierra de Albania cuando murió mi último hijo valiente y fiel y como no quedaba nadie para defender mi Santuario, dejé la tierra de Albania llorando para ir a Italia.
Del mismo modo, donde no soy amada, donde no soy obedecida, donde no soy querida por mis hijos, salgo y voy en busca de otras almas mejores, buenas y llenas de obediencia y amor, para derramar mis gracias. sobre ellas. .
Siempre soy obstaculizada y perseguida por mi enemigo, pero nunca derrotada, así que fui a Genazzano.
…Es con estos buenos hijos que vivo y permanezco. Con los que luchan por mí,  los que me obedecen, los que me aman. Los que no tienen miedo del enemigo, los que no tienen miedo del mundo, no tienen miedo de mostrarse como Mis verdaderos hijos. Y dar mi testimonio, ante toda la humanidad, anunciando mis mensajes sin temor.
Sí, siempre llenaré a esos hijos con mi gracia y amor.
…Así seréis mis valientes luchadores en este tiempo de gran apostasía que requiere: fuerza, valentía, generosidad, entrega total a mi servicio y al de mi Hijo Jesús, para pelear el buen combate, vencer las fuerzas del mal y hacer de verdad mi corazones triunfar aqui y en todo el mundo.
… Bendigo a todos mis hijos: de Fátima, de Genazzano y de Jacareí”.
A todos mis hijos les digo: ¡Contemplad, contemplad el Amor!

23 de abril, mensaje de Nuestra Señora, por la mañana.
(María Santíssima): “Querido hijo Marco,… durante 32 años me has servido continuamente día y noche: en el amor, en el dolor, en la obediencia, en la docilidad.
Habito en tu alma, en tu corazón como en un jardín de placer y de descanso.
…El que me busca, ciertamente me encontrará. Vivo en quien me bendice, vivo en quien me ama, vivo en quien me obedece, vivo en quien dedica su vida totalmente a mí.
Sí, quien me encuentre encontrará la paz. Quien escuche mis consejos salvará su vida.
…Por eso, hijos míos, escuchen mi consejo, porque Yo soy la Madre del Buen Consejo que dice a todos: Amen a Dios sobre todas las cosas, vivan cerca de Él, unidos a Él en el verdadero amor y nunca se separen de Él por nada.
… Los bendigo a todos con amor: desde Lourdes, desde Pontmain y desde Jacareí”.

16 de abril, mensajes de Jesús y Nuestra Señora, por la noche.
(Sagrado Corazón de Jesús): “Mis almas escogidas, hoy vengo con mi Santísima Madre a decirles a todos:
Mi Misericordia es grande y aquí se ha derramado sobre todos vosotros amplia y abundantemente. ¡Son 32 años de Misericordia! ¡Son 32 años de Amor! Son 32 años de continua, inmensa compasión de mi Sagrado Corazón hacia todos ustedes... 32 años de Misericordia son muchos, por lo tanto pronto terminará este tiempo de Misericordia y comenzará el de Justicia porque mucho tiempo se ha concedido a ustedes.
Y si aún permanecéis endurecidos en vuestros errores, en vuestra indiferencia, en vuestro desamor hacia Mí, hacia mi Padre, hacia mi Santísima Madre, Yo cambiaré el tiempo de Misericordia por un tiempo de Justicia.
Por eso, hijos míos, convertíos mientras dure este tiempo de Misericordia, porque entonces no habrá más. Los árboles que ahora no dan fruto serán cortados, malditos, como la higuera, y arrojados al fuego.
Ahora es el momento de dar fruto, y no el momento de esconderse.
…Ahora es el momento de que ilumineis el mundo, de salir y ser los apóstoles de los últimos tiempos que mi Madre y Yo venimos a pedir.
…Todos los que vengan aquí con un corazón abierto y se arrepientan de sus pecados encontrarán Mi Misericordia y cada corazón contrito que clame por Mi Misericordia aquí será perdonado y recibirá Mi Misericordia.
…Mi Padre envió a Juan el Bautista para anunciar mi primera venida, ahora os envío al mundo con mi Madre para anunciar mi segunda venida. Bienaventurados los que creen y se preparan al encuentro del Esposo que ya viene.
Ahora los bendigo a todos con amor: desde Dozulé, desde Plock y desde Jacareí".
(María Santísima): “Mis amados hijos, vengo a pedirles nuevamente: recen todos los días la Coronilla de la Misericordia meditada hecha por mi pequeño hijo Marco.
…Hijo mío Marco, hace 30 años me pediste la gracia de estar libre de envidias, de estar libre de pereza
. Estas dos gracias que tanto querebas, tanto deseabas y tanto orabas, te las concedí.
Por eso, hijo mío, alégrate porque pronto recibirás también la otra gracia que con tanto ardor me pides, la de mi llama de amor sin interrupción y en grado sumo.
Así seréis mi llama incesante de amor, mi llama de misericordia y de paz en medio del mundo que apagará finalmente la llama del odio, la llama de la maldad de Satanás.
Adelante, hijo mío, sigue haciendo mis Rosarios meditados,
…Os bendigo de nuevo a husted y a todos mis hijos: desde Fátima, desde Lourdes y desde Jacareí”

16 de abril, Domingo de la Misericordia, por la mañana,
(María Santísima): “Queridos hijos, hoy es el día de la Misericordia de mi Hijo Jesús, es también el día de la Madre Celestial, la Madre de la Misericordia. Y vengo del Cielo para deciros a todos: ¡Quiero Misericordia y no Justicia! Yo no quiero la muerte del pecador, porque un pecador muerto no sirve al Cielo, ni al Señor, ni a Mí, quiero que mis hijos estén vivos, vivos para la vida eterna. Por eso, vine delante de mi Hijo para traer una vez más Su Misericordia a la Tierra.
Llevo 32 años aquí, ofreciendo continuamente a todos la Misericordia del Señor, el perdón, la gracia, la salvación y la paz. Pero, si continúan rechazando mi amor maternal, si continúan rechazando la Misericordia Divina que les traigo, entonces mi Hijo Jesús no tendrá más remedio que instituir la Fiesta de la Justicia en breve.
Antes de que llegara el día de la Justicia, Él me envió aquí con Su Misericordia para ofrecer el perdón y la salvación a todos los que lo deseen. Acoged esta Misericordia, hijos míos, porque os digo, 32 años ya es mucho tiempo, mucho tiempo para la Misericordia. Y han sido pocos los que han aceptado esta Misericordia, pocos los que han dado el fruto de todo lo que Yo he venido aquí del Cielo a ofrecer. Si seguís así, despreciando las cosas del Cielo y buscando sólo las cosas de la tierra y vuestra voluntad, ya no habrá más Misericordia y de pronto os encontraréis cara a cara con el justo Juez de todas las cosas.
Por eso rezad todos los días el Rosario, rezad todos los días la Coronilla de la Misericordia, para que seáis dignos de esta Misericordia. … Convertíos, no hay más tiempo que perder con las cosas transitorias de este mundo, dedicaos a las cosas del Cielo y orad, orad, orad! Ofreced vuestro trabajo, vuestro estudio y vuestros sufrimientos al Padre para que junto a mí podáis alcanzar la Misericordia.
Ahora los bendigo a todos con amor: desde Fátima, desde Pontmain y desde Jacareí

9 de abril, Domingo de Pascua, mensajes de Jesús Sagrado Corazón y María Santísima, por la tarde,
(Sagrado Corazón de Jesús): “Mis amados hijos, mis almas escogidas, hoy vengo con mi Santísima Madre en la fiesta de mi resurrección para decirles a todos ustedes:
He resucitado para estar con vosotros hasta el fin del mundo.
He resucitado para renovar, para recrear todas las cosas.
He resucitado para recrear las almas de todos vosotros, lavándolas en mi Sangre, purificándolas en mi Gracia, embelleciéndolas con mi Amor, dando a vuestras almas mi gracia santificadora y misericordiosa para transformaros en obras de gran perfección y santidad para la gloria del Padre.
…He resucitado para estar con vosotros especialmente ahora en estos tiempos de gran tribulación y gran apostasía, para ser para todos: luz, Padre, amigo, refugio, fortaleza, fortaleza. Y ser el maestro que os guíe a todos por el camino de la santidad y del verdadero amor.
Esta generación, que ha llegado a ser peor que la del Diluvio y la de Sodoma y Gomorra, pronto verá manifestarse mi Justicia vengadora. Vengaré a mi Santa Madre y castigaré a todos aquellos que se burlan de ella, que la desprecian, que la han traspasado con la espada de la desobediencia.
Y haré desaparecer este mundo corrompido por el mal, y en su lugar recrearé esta humanidad, haciéndola renacer para un tiempo nuevo: de santidad, de perfección, de belleza, de obediencia y fidelidad a mi Padre y a mi Sagrado Corazón. .
Por eso, hijos míos, debéis ahora abandonar verdaderamente este mundo que ya ha hecho su elección, que ha elegido morir por la vida eterna despreciando mi amor, despreciando mi voluntad, despreciando mis leyes y mi palabra.
Para que luego podáis ser parte de la generación bendecida, formada, guiada, alimentada, conducida, educada y llevada por mi Santísima Madre. Para que podáis entrar en el Cielo Nuevo y la Tierra Nueva, el mundo nuevo recreado por nuestra llama de amor, la llama de nuestros Dos Corazones.
… Os bendigo a todos: desde Dozulé, desde Paray-Le Monial y desde Jacareí.
(María Santísima): “Hijos Míos, vengo nuevamente del Cielo para deciros: ¡Yo soy vuestra Madre, Yo soy la Madre Gozosa de la redención!
Ese día mis ojos, todavía llenos de Lágrimas de Sangre, contemplaron a mi Hijo Jesús entrando en la habitación donde yo estaba, más brillante que el sol, y lo abracé, convirtiéndome con él en una sola llama de amor.
Nuestros corazones en un solo estremecimiento de amor palpitaron, y entonces, todas mis penas fueron quitadas de mi Alma Santísima.
¡Soy la Madre Gozosa de la Redención!
¡Yo soy la gloriosa Madre de la Resurrección!
…Yo soy la Madre de la Gloria, y con mi sí unido al sí de mi Hijo, reparé la desobediencia de los primeros Padres y colaboré en la redención, restauración y recreación de toda la humanidad, finalmente liberada de la esclavitud y la tiranía. del pecado y de Satanás.
…Orad mucho, preparaos para este día viviendo en santidad, como bien dice mi hijo Marco, no basta con orar, hay que vivir la santidad, hay que querer la franqueza, hay que querer no tener malicia, hay que quiero ser bueno
…Sí, Marco, en verdad te ha sido dada la gracia de ser inmune a la corrupción que causa el amor al dinero, a la avaricia… y a todos los vicios que tienen los seres humanos por la posesión del dinero y de muchos bienes.
…Orad, desead como mi hijo Marco: virtudes, perfección, franqueza, santidad, y esto también os será dado según vuestros deseos.
…Ahora bendigo a todos con amor: desde Lourdes, desde Pontmain y desde Jacareí”.

9 de abril, Domingo de Pascua, mensaje de Nuestra Señora, por la mañana.
(María Santísima): “Hijos míos, hoy, al contemplar la victoria definitiva de mi Hijo Jesús sobre el pecado, el infierno y la muerte, vengo de nuevo a vosotros como la Madre gozosa de la Redención y de la Resurrección.
Sí, mi Hijo Jesús, al amanecer de este día, entró en el lugar donde oraba y velaba, esperando su Resurrección. Me abrazó, nuestros dos Corazones se fundieron en una mística llama de amor. Y entonces, toda sumergida e inserta en ella, toda cubierta, toda envuelta en su gloria, tuve una alegría tan mística en mi Corazón Inmaculado, que de un momento a otro toda mi amargura causada por la Pasión se transformó en radiante alegría. y luz de la Resurrección.
Entonces todo el Infierno, estremecido y derrotado, pudo contemplar mi mayor victoria maternal con mi Hijo Jesús resucitado.
…Soy la Reina victoriosa del Amor, porque fue por el amor de mi Hijo Jesús que él venció al mundo. Amaos los unos a los otros como yo os he amado. Y habiendo estado en el mundo, os he amado hasta el fin.
Sí, la victoria de mi Hijo Jesús en este día es la victoria del Amor. No hay mayor amor que este, dar la vida por los amigos. Con este amor mi Hijo Jesús os ha amado a todos, con este Amor ha vencido al Infierno y será por la fuerza del Amor que volverá a triunfar en este mundo, destruyendo por completo la acción de Satanás. Quien ahora trabaja incansablemente para llevar al mundo entero a la rebelión contra el Señor y su Ley de Amor.
…Por lo tanto, confíen y esperen, que el desánimo nunca se apodere de sus corazones.
Perseverad una vez más, dos veces, tres veces y siete veces más. Y entonces, mi Inmaculado Corazón, hijos míos, recompensará con la victoria toda vuestra obediencia a mis mensajes.
…Hijo mío Marco, …como mi Hijo Jesús, has sido obediente y dócil al Padre y diciendo siempre sí a su voluntad. Así como yo, con mi sí y con mi obediencia al Padre, Jesús y yo salvamos al mundo. Del mismo modo, por vuestro sí dado, renovado, reafirmado, confirmado y reconfirmado ya desde hace 32 años, la gracia de la resurrección espiritual ha sucedido en la vida de muchos de mis hijos y volverá a suceder prodigiosamente pronto en el mundo entero.
…Para eso, nuestros corazones deben latir juntos, juntos deben pensar, deben sentir, deben hablar, deben amarse y amar a toda la humanidad. Y conmigo intercede, lucha, trabaja, sufre, ofrécete por la salvación de la humanidad, para que juntos podamos triunfar.
…A ustedes, mis amados hijos, y a todos los que están aquí, ahora los bendigo generosamente: desde Nazaret, desde Lourdes y desde Jacareí”.

8 de abril, Sábado Santo, mensaje de Nuestra Señora,
(María Santísima): "Hijos Míos, Yo soy la Madre del Dolor y de la Soledad, en este Sábado Santo me encontraba sola sin mi Hijo Jesús, que había muerto en el sepulcro.
Sola sin mi Hijo. Sola sin mi amor. Sola sin mi única alegría. Sola sin mi única razón de vivir.
Sí, desoladas y desgarradas por el dolor interiormente, pero llena de fe y de esperanza en la gloriosa Resurrección de mi Hijo Jesús.
Sola, sola aún hoy, porque tantos de mis hijos me abandonan, abandonan a mi Hijo Jesús, entregándose a las cosas del mundo, a los placeres, a los vicios, viviendo una vida sin Dios, sin amor y lejos de mi Corazón.
Sola, porque aún hoy muchos de mis hijos que también han sido bautizados y han vivido la Fe Católica, su vida traiciona a mi Hijo Jesús, la cambian por los bienes del mundo como lo hizo Judas, abandonan su santa doctrina y se entregan a los errores. , entrégan a los vicios, entrégan a la mala forma de vivir en este mundo.
Sola, porque aún hoy tantos de mis hijos viven lejos de la oración, lejos de la penitencia, lejos del sacrificio, lejos de la meditación. Y es por eso que la mayoría de las veces mis hijos no piensan en mí, no oran conmigo, no me acompañan en la oración, no interceden conmigo por la salvación de la humanidad. Y por eso mi Corazón todavía hoy está sumergido en un mar de dolor y soledad.
…Sí, quiero que haya muchas almas pequeñas que, no sólo oren continuamente por el acto de amor, sino que siendo un acto de amor incesante, formen la hermosísima corona de rosas místicas de amor alrededor de mi Corazón.
Sí, aquí, donde terminaré los proyectos que comencé en La Salette, donde aparecí llorando, espero que haya muchas almas que consuelen y reparen mi Corazón.
…Así podré formar la falange, la corte de las almas más pequeñas de amor, para ofrecerlas al Padre, para obtener misericordia y equilibrar su divina Justicia.
…Marco, en este largo Sábado Santo que estás viviendo, quédate a mis pies: consolándome, amándome, pensando sólo en mí, viviendo sólo para mí y para mí, enjugando mis lágrimas de dolor con tu amor, con tu obra , con tu entrega, con tu vida toda mía.
…Esperando el regreso de mi Hijo Jesús en su gloria como esperaba el momento glorioso de la resurrección de mi Hijo.
…Sí, al comienzo de las Apariciones me pediste la gracia de amarme sobre todas las cosas, deseaste esta gracia y te la concedí. Me pediste la gracia de estar libre de tentaciones con personas del sexo opuesto. Habéis deseado esta gracia, habéis orado y Yo os he dado esta gracia hasta el final de vuestra vida.
Tú también me has pedido siempre la gracia de la obediencia y la fidelidad a mí, la sabiduría para cumplir mi voluntad con perfección y exactitud. Lo deseaste, lo buscaste con todas tus fuerzas y te lo di hasta el final de tu vida.
Tú también pides y deseas mi llama de amor en grado sumo, que me ame sin interrupción y a través de mí amar a mi Hijo sin interrupción día y noche. Siga deseando esta gracia y orando por esta gracia porque te será dada pronto y para toda la vida.
Sí, todo lo que me pediste fue justo, santo, perfecto y útil para mí y para ti. Y por eso, el Señor consideró tus justas peticiones y satisfizo todos los deseos de tu corazón dándote todo lo que deseabas, todo lo que más deseabas.
…Pronto hasta tuyas lágrimas se secarán cuando veáis el triunfo de mi Inmaculado Corazón en el mundo entero.
…Sed mis consoladores en mi gran soledad de este tiempo.
Os bendigo: desde Nazaret, desde Jerusalén y desde Jacareí».

7 de abril, Viernes Santo, mensaje de Nuestra Señora,
(María Santísima): “Hijos míos, hoy, al contemplar mi mayor dolor en lo alto del Calvario, junto a mi Hijo Jesús que agoniza y muere por la salvación de todos vosotros. Vengo otra vez del Cielo para deciros:
Yo soy la Virgen Dolorosa, sufro, he sufrido por los sufrimientos de mi Hijo. Yo también sufro por el sufrimiento de todos mis hijos.
Soy Nuestra Señora de los Dolores que sufre por los grandes castigos que esta humanidad ha merecido y que están llegando a varias naciones que simplemente desaparecerán de la faz de la tierra cuando ocurraran.
Yo soy vuestra Madre Dolorosa, y así como estuve al lado de mi Hijo Jesús en el camino del Calvario y en la Cruz, también estoy al lado de cada uno de vosotros, hijos míos, para ayudaros a llevar la cruz.
Estoy aquí como estuve al lado de mi Hijo Jesús, para daros la fuerza de llevar la cruz cada día, para cumplir la misión que el Padre tiene para cada uno de vosotros, para ayudaros a sufrir conmigo, a orar y a ofrecer sacrificios por la salvación de tantas almas que corren el riesgo de ser eternamente condenadas.
Hace 32 años que estoy aquí para ser la Madre, la Maestra, la Guía, la Líder de todos mis hijos, para guiarlos por el camino recto que lleva al Cielo, que es el mismo camino que tomó mi Hijo Jesús, que pasa por la cruz sí, pero que alcanza la resurrección, la gloria, la victoria eterna.
Estoy aquí para ser una Madre consoladora para todos ustedes, un refugio, apoyo, amor y paz en medio de un mundo donde el amor, la paz, la armonía simplemente han desaparecido y solo Satanás reina en todas partes con guerras, violencia, discordia y pecado. .
Estoy aquí para ser para todos vosotros la estrella resplandeciente, el Sol luminoso que os conduce y guía a todos en medio de las espesas tinieblas que ahora descienden sobre el mundo, que os guía a todos hacia el Cielo, hacia el Paraíso, hacia Dios.
Contemplé a mi Hijo muriendo en la Cruz, contemplé su sangre derramada por todas partes por la salvación de vosotros, hijos míos. Y como Madre y Corredentora uní mis Lágrimas de sangre a la sangre de mi Hijo, para ofrecerlas al Padre por la Redención de toda la humanidad.
Soy la verdadera Corredentora de la humanidad, con mis sufrimientos, con mi Dolor unido al de mi Hijo Jesús, reparé el pecado de soberbia y desobediencia de la primera Mujer y mi Hijo reparó el pecado del primer Hombre.
Y juntos pudimos ofrecer al Padre el sacrificio de amor, de obediencia, de alabanza, de sumisión que obtuvo verdaderamente el perdón del Padre para todo el género humano, para toda la humanidad.
…Que mis hijos permanezcan siempre aquí en oración, aprendiendo el verdadero amor a Dios, el verdadero amor a mí. Y consolándome con su amor, con sus oraciones, con su docilidad, con su atención amorosa como la tuvo mi hija Santa Magdalena: permaneciendo siempre atenta, amorosa, escuchando dócilmente mi palabra y la palabra de mi Hijo Jesús a nuestros pies.
Así toda la humanidad se transformará en un jardín de santidad, de amor, de obediencia a la Santísima Trinidad y de belleza, reflejando perfectamente mi belleza inmaculada.
…Soy suficiente Maestra, Madre y Guía para ustedes.
…Sí, ahora es el momento de hablar, de anunciar, todavía hay tiempo de salvar muchas almas. Hasta que se salve un cierto número de almas. Hasta que se tomen ciertos pasos, mi Triunfo no puede suceder.
…Y a todos mis hijos les pido: recen todos los días el Rosario, recen la Coronilla de mis Lágrimas, porque quien la rece tendrá verdaderamente mi presencia con los Ángeles y los Santos en el momento de la muerte para conducir su alma al Cielo. Y en todo vuestro dolor, en todo vuestro llanto en este valle de lágrimas, Yo seré la Madre, la Consoladora y el refugio seguro.
…Ahora los bendigo a todos con amor: desde Nazaret, desde Jerusalén y desde Jacareí

2 de abril, mensaje de Nuestra Señora,
(María Santíssima): “Hijo mío Marco, hoy mi Mensaje será muy corto, pero importante.
Los corazones de los seres humanos se han endurecido por completo y ahora son insensibles a las gracias y llamados del Cielo. Por eso el gran y temible Castigo que profeticé en Japón, en Akita, vendrá.
Sí, fuego caerá del Cielo y, como dije aquí al comienzo de mis Apariciones, los rayos caerán sobre la Tierra y la partirán y los Castigos serán grandes, grandes en cada parte de la Tierra.
Los seres humanos han quitado a Dios de sus familias y de sus ciudades, por eso la violencia, el desorden, la maldad, el pecado, la injusticia y la falsedad reinan por todas partes. Por lo tanto, habrá un castigo purificador.
El brazo de Mi Hijo se hace cada día más pesado y Yo no puedo sostenerlo más. Si la humanidad no escucha mis Mensajes, pediré a mi Hijo que aplique su Justicia.
Lo único que puede cambiar verdaderamente la Justicia en Misericordia es la conversión sincera por las obras del amor, por las obras del verdadero amor a Dios.
Que cada uno reflexione sobre su vida y cambie todos sus malos hábitos, sus defectos y busque la santidad.
Soy la Madre de toda la humanidad y no he venido aquí para el mal de nadie, sino para el bien, para la salvación de todos. Pero si no escuchan mis llamados maternales, ¿cómo, cómo puede Dios tener piedad y misericordia de aquellos que no tienen piedad y misericordia de su propia Madre?
¡Por eso, hijos míos, no me hagáis sufrir más! Recen todos los días mi Rosario que es medio seguro de salvación si se reza con el corazón.
…Estoy agotada por haber pedido tanto por la conversión de mis hijos. No me hagáis sufrir más y convertid vuestros corazones con obras de amor.
…Bendigo a todos mis hijos desde: Fátima, desde Lourdes y desde Jacareí”.

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